Teníamos ganas de hacer una escapadita de fin de semana, cerca de Madrid (para no pegarnos la paliza de conducir) y empezamos a ver cosas sobre los pueblos de la arquitectura negra de Guadalajara. Pensamos que era un buen destino para un par de días, lo justo para desconectar, y vaya si lo fue. Ha superado nuestras expectativas, así que os lo contamos por si os puede venir bien un poco de información o simplemente para disfrutar de las fotos de Ma y de mi prosa.